Cezura
es una aldea de unos pocos habitantes
situada
en la falda norte del Monte Bernorio.
En
sus inmediaciones corre el riachuelo Mardancho,
afluente
del Ebro que nace en el valle de Valderredible.
Muy
cerca del pueblo, y visible desde él,
hay
una enorme cueva llamada “El Cuevatón”.
Cezura
es la primera población de la Palencia de Valderredible;
el
eremitorio se halla en el límite entre Palencia y Cantabria.
Fue
una oquedad ya habitada por los trogloditas
y
luego ampliada por los primeros monjes cristianos
que
llegaron a la aún pagana Cantabria en los siglos III y IV.
Se
piensa que en el interior de la cueva pudo haber una iglesia
que
con el tiempo ha desaparecido.
En
su suelo hay un foso excavado que se cree que fue
un
depósito de agua para uso de la comunidad cenobítica.
En
torno a la cueva grande los ermitaños abrieron otras pequeñas,
colgadas
en la roca,
que
quizás en su momento tuvieron algún tipo de cerramiento.
No
se sabe si fueron habitaciones, retiros para la oración individual
o
escondites frente a posibles ataques.
Por
el tamaño de la cueva, se ha llegado a considerar
que
pudo ser el eremitorio más importante de la zona,
antecedente
de los cenobios medievales.
Después,
ha sido utilizada como refugio por enfermos, peregrinos,
guerrilleros,
pastores, vagabundos...
Hoy
la cueva se encuentra en mal estado y ha sufrido derrumbes,
por
lo que es difícil imaginar cómo fue realmente
en
los tiempos en que la habitaron los monjes.
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